Una pregunta muy frecuente que las madres hacen a los dentistas es: ¿a qué edad debo llevar por primera vez a mi hijo a una consulta con el odontopediatra?; La respuesta es simple, apenas el niño tenga su primer diente; es decir, alrededor de los 4 a 6 meses de edad. Esta primera cita servirá no sólo para evaluar el estado de salud bucal y desarrollo del niño; sino también, para orientar a los padres sobre los cuidados adecuados para mantener una óptima salud bucal y generar un mejor clima y relación niño – dentista.
Uno de los principales problemas de salud bucal en niños es la caries dental. Esta es una enfermedad producida por la presencia de determinadas bacterias en la boca llamadas S. mutans, así como de la ingesta continua de azúcar y la falta de una buena técnica de higiene.
Pero, ¿cómo llegan estas bacterias a la boca de nuestros niños? Los medios de infección son variados; pero, múltiples estudios afirman que una de las principales fuentes de infección en niños muy pequeños son los padres. Esto significa que si los padres tienen una elevada cantidad de las bacterias en la boca, es muy probable que sus niños presenten el mismo problema. Las vías de contagio entre padres e hijos suelen ser el uso del mismo cepillo de dientes y pasta, el probar los alimentos del niño con la misma cuchara o saludarlos con besos en la boca. Incluso, el contagio puede producirse al soplar los alimentos para enfriarlos.
Los principales mecanismos de acción para disminuir el riesgo de caries en los niños son la higiene bucal, dieta adecuada y uso de suplementos con flúor. El flúor deberá ser recetado por el odontopediatra tras una evaluación personal, ya que dosis elevadas de éste pueden ser perjudiciales para la salud general y dental del niño.
Las técnicas de higiene oral varían, de acuerdo, a la edad, cantidad de dientes presentes y colaboración del niño. Es muy importante que los padres tengan una buena rutina de higiene oral, ya que se sabe que los niños tienden a imitar a los padres en estas cosas. Si un niño nunca ha visto a sus padres usando hilo dental o enjuagues, es muy poco probable que éste se acostumbre a usarlos.
Por último, la orientación sobre la dieta y alimentación de los niños, no sólo se refiere a evitar los dulces o alimentos con azúcar. También es importante evaluar los medicamentos usados con frecuencia por los niños, ya que muchos de estos contienen azúcar o miel, y es necesario realizar una buena higiene luego de su ingestión.
Otro tema importante es informar a los padres sobre los beneficios de la lactancia materna exclusiva hasta los 4 a 6 meses de edad, y los efectos que esta tiene sobre el desarrollo bucal, ya que se ha demostrado que los niños alimentados de esta manera tienen un menor riesgo de presentar problemas de respiración bucal, caries dental, deglución incorrecta y hábitos de succión como chuparse el dedo o un chupón.
Como vemos, es muy importante visitar al dentista a una temprana edad, para así, poder prevenir futuros problemas dentales y mantener una excelente salud bucal en nuestros bebés. Por eso, no lo duden, si tienen un niño pequeño o incluso si están esperando la llegada de su bebé, acudan lo antes posible con el odontopediatra, él sabrá guiarlos y los ayudará a mantener la boca de sus hijos libre caries.
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